Están a puntito de llegar (si no han llegado ya) las vacaciones de Pascua. Para los que tenemos niños en casa sabemos que eso supone tener que hacer un montón de manualidades y juegos en casa pues nunca sabemos que tiempo nos hará fuera. Lo mismo nos hace un sol espléndido (esperemos) que igual se las pasa lloviendo toda la semana.
Para estos días de lluvia en los que ya hemos agotado nuestros recursos os traigo esta manualidad fácil, fácil que podemos hacer con los niños y que se lo pasaran pipa, seguro.
Necesitamos:
- Cartulina blanca y rosa para hacer las orejas.
- Un plato de papel.
- Rotulador permanente.
- Pegamento, tijeras y un lápiz.
Hacemos las orejas recortando las cartulinas con la forma aproximada y pegando la rosa sobre la blanca (debemos recordar de hacer la rosa un poco más pequeña para que se superponga).
Una vez tengamos las orejas hechas las reservaremos mientras hacemos la cara de nuestro conejito con el rotulador permanente.
Luego solo tenemos que pegar las orejas en su sitio y ya tendremos nuestro feliz conejo de Pascua.
Yo le puse además un cordel para poder colgarlo como adorno en la puerta de la cocina. A los niños les encantó.
Venga, ahora vosotras, que esta vez no tenéis excusa, pues es fácil, fácil, fácil y muy resultón.
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